Cuanta razón...

Recuerdas cuando eras un enano, cuando querías llamar la atención de tus padres a cada momento, para no aburrirte, para no estar solo y la mejor solución era llorar por la noche y rápidamente venían, te daban un beso, un abrazo... Te daban mimos y mucho cariño...



Dicen que las cosas con el tiempo cambian, e increíblemente hasta esas insignificantes cosas han cambiado de una forma drástica, pasando de llorar por la noche para llamar la atención a llorar por la noche para que nadie te vea en tu cama y evitar las preguntas...

Un recuerdo feliz...

Quiero no sentirme mal a cada momento, disfrutando de una añoranza amenazadora a cada segundo, y sumirme en mis recuerdos cada noche antes de dormirme.
Recordar cada momento vivido, sonreír por ello y hablar sola pensando en todo lo que te quisiera decir mientras las lágrimas recorren mis mejillas y mi voz se ahoga en un susurro mudo lleno de angustia, sabiendo que nada de esto ocurrirá como mi mente se imagina de una forma positiva y ojalá las cosas no hubieran ocurrido así, ni hubieran continuado como están continuando.
Mi yo, aquel con el que ocurrieron estos sucesos, aquel que hizo lo que hizo, aquel... que quiero dejar en el pasado, haciendo lo que a mi mente le viene en gana... sintiendo las palabras de la gente que me dice que por qué soy así ahora, que que me ocurre, que estoy distinta...
Y tanto que mi mente ha cambiado, tanto cambio y... simplemente, quiero volver ha hacer cosas... pequeñas e insignificantes cosas que hacía antes... y que por pequeñas e insignificantes que sean, han sido las más importantes de mi vida, las que me han alegrado en mi día, que me han hecho sonreír, vivir bien y ser feliz... hasta llorar... pero de alegría...



No morir, si no, no haber nacido...

Todo el mundo me dirá que soy pequeña... una enana, inmadura, cría, estúpida... Sin embargo yo ya puedo morirme, ya ahogué la vida de una persona que me importa, ahora la justicia tomará sus cartas, al igual que el karma, dios o quien sea, aunque no crea en ellos... tan solo creo en mi muerte, en convertirme en polvo mientras me consumo a través del humo de un porro, o del ahogamiento del alcohol en mi corazón...
Mente que no aguanta la culpa, ojos que no soportan ver... una buena persona que tenía problemas, podía superarlos gracias a un pilar, yo cual asesina lo derrumbo... Todo a la mierda...
La culpa me perseguirá durante toda mi vida, durante mi muerte.


Quiero no pensar en nada, no saber nada, no recordar nada, que nadie me recuerde...
No es que quiera morirme, es que quiero no haber nacido...

Una etiqueta en la frente que ponga "FUCK ME"

Y se podría interpretar de dos maneras, "follame o jodeme" venga, te dejo elegir cual prefieres...
Porque cuando empiezas por un follame, acabarás en el jodeme, la experiencia dice muchas cosas, cosas que puedes entender o no hacerlo, también puede ser porque de verdad no lo entiendas o, por el contrario porque no te quieras enterar, en ese caso te digo que abras los ojos de una vez, que las cosas son muy bonitas hasta que te cansas y he de decir que uno se cansa pronto, no se tengan esperanzas de vida ante un coma permanente, un estado crítico del corazón al enamorarse y al haberse quedado solo de golpe, una puñalada trapera, un movimiento discreto, silencioso... pero mortífero en casi el 100% de los casos... por desgracia.
Típica mente débil, herida debido a este ataque certero, observará la mejor posición que para ella se encontrará en el que da la puñalada, sin embargo aquel que acesta el golpe certero muchas veces no sabe si es certero y otras veces aunque no sepa, no quiere hacerlo, se desarrolla una acción que no está en sus manos y que se le escapa a su acción y cuando ya es demasiado tarde, ya ha sucedido, la mente odia, la sangre amarga y el corazón muere.


Un perdón no es suficiente, así que, en una mente decente de alma benévola, prefiere un corazón de su pecho atravesado, que una acción de la que arrepentirse toda la vida...